info@alicialakatosalonso.com

¡Pacaaa!, ¿No me dijiste hace siete meses que la hija de la Luisa estaba preñada?… Pues está más lisa que una tabla… ¡Lo que yo te diga, se habrá puesto una faja!

Ya sé que el título me ha salido un poco largo, pero ¿a qué visualizáis esta escena?

Si quieres ser el centro de atracción de una fiesta, o comida familiar o reunión de amigos; si quieres provocar un impresionante silencio en el que no se escuche ni el vuelo de una mosca, pronuncia (eso sí, con cierto halo de misterio) estas frases mágicas: “Por favor, que no salga de aquí, pero….. ¿sabéis de lo que me he enterado?”

Después puede que la información sea verídica, o no. Y entonces… ¿qué pasa?

Cuando se ha dicho alguna cosa de alguien, aunque más tarde se demuestre que no es cierta, ¿quién lo borra de la memoria de quienes lo han escuchado y juzgado? Siempre queda el…. “Bueno, bueno, cuando el rio suena…”


El otro día nos quedamos todos impresionados, viendo y leyendo la información con la que nos bombardearon los medios de comunicación, de la terrorífica paliza que le habían dado a una niña de 8 años, otros compañeros, en un colegio de Mallorca.

Rápidamente juzgamos al colegio, a los profesores…”¿Dónde demonios estaban mientras en el patio poco menos que descuartizaban a esta criatura?” Y sobretodo a esos niños que, a partir de ese día, iban a llevar ya un sello de violentos y casi de asesinos.

Todos nos lo creímos, porque ¿a quién se le ocurrió contrastarlo? Los periódicos lo publicaron y las televisiones lo repitieron una y otra vez. ¡Pobre niña!, ¡pobre familia!,  hasta su madre y su hermana salieron pidiendo justicia…

El sábado, todos esos mismos medios de comunicación que estigmatizaron a este colegio y a estos chavales, tuvieron que tragarse sus palabras y recibir un “zasca” (como se dice ahora), o un tirón de orejas, (como se había dicho siempre) por parte de Fiscal Superior de Baleares.

La niña sufrió lesiones “leves”, en lo que fue considerado casi como una pelea más de colegio. ¿Que, posiblemente se pasaron con la fuerza?, ¿que no tiene justificación, ni esta ni ninguna otra pelea? ¡Por supuesto!, pero de llegar al hospital con unos arañazos y alguna magulladura, a decir que ha entrado en urgencias con el hígado saliéndosele por la boca….¡hay un mundo!

El fiscal pedía: Mesura y rigor y avisaba del peligro que se cree una corriente de opinión basada en una única versión, sin un contraste mínimo.

Este hecho, no sé si ha podido ser provocado con carácter lucrativo, para recibir algún tipo de compensación económica por parte del colegio, o de la Junta Balear, o de las arcas del rey, pero otros hechos difamatorios solo son por hacer daño, o por entrar en la rueda mundial del “hablar mal del prójimo”, que es lo que se lleva y lo que vende.

A veces tenemos una vida tan pobre y tan falta de argumentos para defenderla, que necesitamos escarbar en la de los demás, a ver cuanta porquería encontramos. Hablar por hablar, ¡por que sí!, por hablar de algo, porque nos aburrimos, sin medir la importancia de nuestros comentarios, ni la consecuencia que puedan tener.

Y lo malo, no está ya en quien lanza un órdago por rencor, o por cobardía, o por salvarse de las brasas, o porque le va una presidencia o un sillón en una institución pública, si no el que lo hace gratuitamente. El que va a contar un hecho, supuestamente comprometido, de alguien que ni le va ni le viene, ni tan siquiera a lo mejor conoce, ni le importa un pito. 

Después, si una persona con más criterio le confirma que aquello que ha contado era un bulo, simplemente dirá: ¡Ah bueno, a mi me lo habían dicho! y se quedará tan pancho.

Dios nos libre de las calumnias. “Son como vientecillos que comienzan ligeramente a soplar, a ras de suelo, en voz baja, y poco a poco comienzan a zumbar, se meten por los oídos, llegan al cerebro y salen disparadas por la boca como un auténtico disparo de cañón……..”  

Esto es un extracto de la maravillosa aria La Calumnia de la ópera El Barbero de Sevilla. Aquí os la dejo para acabéis con un buen sabor de boca.

¡Ah! y ya sabéis…. antes de hablar del prójimo…..

6 comentarios en “¡Pacaaa!, ¿No me dijiste hace siete meses que la hija de la Luisa estaba preñada?… Pues está más lisa que una tabla… ¡Lo que yo te diga, se habrá puesto una faja!

  • Bueno, bueno tienes mucha razón, tenemos la mala costumbre de hablar sin contrastar, porque hemos oido, porque nos han contado. Asi vamos mal. Los periodistas quizás, supongo que no todos, con tanta modernidad y rapidez, no contrastan no vaya a ser que pierdan la primicia y así no se hace más que aumentar el linchamiento gratuito. Qué difícil y complicada es actualmente la vida de nuestros jóvenes, les hace falta una asignatura de civismo, paciencia, comprensión y sentido común, si se comete un error por una pelota, que harán estos jóvenes cuando realmente te enfrenten a un problema, prefiero no pensarlo.

    Me ha gustado mucho el aria de "El barbero de Sevilla" va como anillo al dedo.

  • Gracias por tocar este tema tan importante, Alicia. Gracias también a tí, Yolanda, por esta fantástica contribución que pone el colofón perfecto. No os quiero quitar ni un àpice de protagonismo a ninguna de las dos porque sois, para mi, las estrellas de la semana. Chapeau!!!

  • Cuanta razón tienes, estamos en la época de la primicia. Hay que ser el primero en dar una noticia. Soltarla, luego….. ya se verá.

    Y que papel tan importante portante jugáis los padres con nuestra juventud. Menos mal que hay muchas Carlas entre esa juventud. Un beso querida amiga.

Responder a Unknown Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *